Así como nosotros necesitamos chequeos médicos regulares, ellos también requieren visitas anuales al veterinario para asegurar que estén en las mejores condiciones (aunque a veces se pongan teatreros a la hora de ir).

 

Cuidar a nuestros bichis va mucho más allá de darles cariño y alimento; implica también comprometerse con su salud y bienestar a lo largo de su vida. 

Estos controles no solo previenen enfermedades graves, sino que también los ayudan a mejorar su calidad de vida para que nos acompañen por mucho tiempo. A continuación, te contamos todo lo que necesitas saber sobre los controles de salud anuales, incluyendo vacunas, desparasitaciones y revisiones generales.

Importancia del control anual

Llevar a nuestra mascota al veterinario una vez al año es un hábito que muchos subestiman. Sin embargo, este chequeo es clave para detectar problemas de salud antes de que se agraven.

Al examinar su condición general y hacer foco en su peso, piel, ojos, dientes y orejas, el veterinario puede encontrar señales de enfermedades o de alteraciones metabólicas en etapas tempranas. Detectar cualquier anomalía a tiempo permite iniciar un tratamiento adecuado, mejorando la calidad y la prolongación de vida de nuestra mascota.

Vacunas: escudo contra enfermedades

Las vacunas son esenciales en la salud de nuestras mascotas. Los perros, por ejemplo, requieren protección contra enfermedades como la rabia, el moquillo, la hepatitis y la parvovirosis. Cada una de estas enfermedades tiene graves consecuencias y, en algunos casos, puede ser mortal. 

Los gatos, por su parte, necesitan inmunización contra la rinotraqueítis, el calicivirus y la panleucopenia, además de la leucemia felina. La mayoría de las vacunas deben aplicarse anualmente, aunque algunas pueden requerir un refuerzo cada tres años. 

Es importante recordar que la aplicación de las vacunas requeridas no sólo protegen a la mascota, sino que también disminuyen el riesgo de contagio en otros animales y en humanos.

A la hora de tomar decisiones, tené en cuenta que cada peludito es único. Es tu veterinario quien evaluará el entorno y estilo de vida de tu mascota para determinar el calendario de vacunación más adecuado, evitando así la sobre-vacunación o la falta de protección necesaria.


Desparasitaciones: una defensa interna y externa

Existen dos tipos de parásitos que pueden afectar gravemente la salud de nuestros amiguitos de cuatro patas. 

  • Los parásitos internos incluyen lombrices intestinales que pueden afectar el sistema digestivo y otras áreas del organismo. Estos suelen adquirirse al ingerir tierra, agua contaminada, o al estar en contacto con otros animales infectados.
    Una desparasitación interna efectiva debe realizarse cada tres meses en la mayoría de los casos. Cuando consultes con tu veterinario para que te recomiende la frecuencia ideal, podés comprar antiparasitarios en nuestra tienda online.

  • Los parásitos externos, como pulgas, garrapatas y ácaros, pueden causar picazón, alergias e incluso transmitir enfermedades como la ehrlichiosis y la leishmaniosis. Aplicar diversas opciones de antiparasitarios de forma regular ayuda a prevenir estas afecciones. Conseguí en Casper pipetas, collares y comprimidos, cada una con distintas duraciones y mecanismos de acción. Consultá con tu veterinario sobre cuál es la mejor opción para tu mascota según su estilo de vida y frecuencia de exposición a otros animales.

Control dental: más que una sonrisa bonita

Muchas veces la salud de las bocas de nuestros bichis pasa desapercibida. La acumulación de sarro puede provocar infecciones dolorosas, inflamación de encías, pérdida de dientes e incluso problemas en órganos vitales si las bacterias de la boca se propagan al torrente sanguíneo. 

Un control anual incluye la revisión de los dientes y encías, y en algunos casos, una limpieza dental profesional. Además, existen productos específicos, como cepillos y juguetes dentales, que ayudan a mantener la higiene oral en casa.

Peso y alimentación: un balance fundamental

Mantener el peso adecuado es clave para la salud de cualquier mascota. La obesidad en perros y gatos puede acarrear problemas como diabetes, artritis, problemas cardíacos y reducir su esperanza de vida. En el control anual, el veterinario evaluará el peso y la condición corporal de tu mascota, y podrá recomendarte un plan de alimentación adecuado a su edad, tamaño y actividad física.


Recordá que no todas las mascotas tienen las mismas necesidades nutricionales, por lo que no es recomendable improvisar o cambiar de alimento sin orientación profesional.

 


 

Exámenes complementarios

Para los bichis mayores de siete años, o en aquellos animales con predisposición a ciertas enfermedades, el profesional puede sugerir exámenes complementarios como análisis de sangre, orina o radiografías.

Estos estudios permiten detectar enfermedades como la insuficiencia renal, diabetes o problemas hepáticos en etapas tempranas. Incluso en animales jóvenes, algunos exámenes pueden ser necesarios si presentan síntomas como pérdida de peso, cambios de apetito o comportamiento inusual. Por eso es importante estar atentos a cambios de actitud o en la rutina para poder comunicarselo al vete y que esté al tanto.

Salud mental: el bienestar también es emocional

El cuidado de la salud mental en nuestras mascotas es otro factor que se incluye en los controles anuales. La ansiedad, el estrés y el aburrimiento pueden afectar a nuestros peluditos, llevándolos a desarrollar conductas indeseables o incluso depresiones. 

El veterinario puede orientarte sobre cómo mantener la mente de tu mascota activa y sobre actividades que ayuden a reducir su ansiedad. Desde enriquecimiento ambiental hasta la posibilidad de usar feromonas sintéticas, hay varias opciones para cuidar de su bienestar emocional. Te compartimos esta nota sobre relajación para bichis para más consejos útiles.

La importancia del registro y la prevención

Llevar un registro de los controles, vacunas y tratamientos de tu mascota es clave. Hoy en día existen apps y libretas de salud digital que permiten tener toda esta información a mano. Así, podés recordar cuándo le toca la próxima visita al veterinario o el siguiente refuerzo de sus vacunas. Un historial médico bien organizado le permite al veterinario evaluar la evolución de la salud de tu mascota y tomar decisiones más informadas sobre su cuidado.

 

En conclusión, el control anual veterinario no es un simple trámite, sino un pilar fundamental en el cuidado de nuestras mascotas. Estas visitas permiten prevenir enfermedades graves, mejorar su calidad de vida y asegurar que nuestras mascotas vivan felices y sanas junto a nosotros. Así que no dejes para mañana la próxima visita al veterinario: sacá turno en tu sucursal preferida en nuestro sitio web.